El concierto se desarrolló entretenido y emotivo sobre todo para Julio Castejón, inamovible al frente del grupo durante más de 50 años y único miembro que ha estado en todos los discos y formaciones, por lo que se le considera la columna vertebral de la banda.
También era un día muy especial para mi, ya que aunque las bandas anglosajonas pongan los acordes, son las de nuestro idioma las que componen la banda sonora de mi vida y la crónica de este tiempo raro desde niño hasta el niño mayor en el que me he convertido, con la moral un poco mermada pero con la misma ilusión que nos aportaba la música y las letras de músicos como estos. Podría decir que "Cambié mi lanza por un destornillador..."
Fueron descargando canciones desde las más nuevas a las más antiguas.
El sonido de la sala no es muy bueno y en algunos temas se notó algunos fallos de sincronismo, seguro que debido a que no era el repertorio habitual y a que fueron pasando componentes de las distintas formaciones, echando de menos a algunos, pero se fue cuadrando conforme iban llegando los temas favoritos, al menos para mi, que son los de su primera época y los de los ochenta.
Termina pues un ciclo de gente que nos ha mostrado el camino sin querer nunca dar lecciones"...no voy a construir un himno con mi voz" ya lo dijo una vez Julio, "yo a mi hijo no le educo si no que le doy ejemplo". Como un ejemplo han sido para muchos artistas y muchos de nosotros.
Gracias por la perseverancia, gracias por poner más que la intención.
Hasta siempre Asfalto.
Una pequeña muestra tomada con mi cutremovil, pero es que estábamos de fiesta, no en calidad periodística.